martes, 16 de junio de 2009

Pasado-Presente-Futuro

No queda nadie en living, estamos vos y yo solos (una vez más). Él intenta pensar que es lo mejor para esta ocasión y yo intento explicarle que es lo que quiero. Entre los dos analizamos que es lo mejor, pero ninguno lo sabe. Miro para atrás e indago. Él trabaja a una velocidad de 100 pensamientos por segundo. Dice no querer trabajar más, pero lo obligo. Entre los dos tenemos que encontrar la respuesta. No es de urgencia pero si quizás una de la más importante. - Esto va llevar tiempo- ; esta en juego el presente y sin ningún lugar a duda el futuro. Lo peor de todo que la culpa la tiene el pasado.

Me pide que ponga un poco de música. No le hago caso, él solo busca distraerse con otra cosa para no trabajar. La culpa es mía por malcriarlo. Negociamos parar 3 minutos para tomar un café. Nuevamente a pensar. Esta vez, bajo los decibeles y los pensamientos disminuyen a la mitad. Le pido que busque en los archivos. Más tranquilo, retrocede 15 años y me muestra los resultados. Ahora el que quiere poner música soy yo, pero él no para. Sigue adelante con su crónica y (casi) dos años después en su relato, se detiene. Un sentimiento de tristeza y rencor nos hace saber que ahí puede estar la respuesta, o al menos una de ellas. Es una marca difícil de borrar, paso mucho tiempo y sigue ahí. Oculta, pero siempre lista para salir a la luz y plantar la incertidumbre en nuestras decisiones.

No es fácil encontrar el equilibrio, pero tampoco imposible. El factor tiempo impone su jerarquía, esta vez bajo el papel de árbitro. El destino estableció las reglas de juego y la experiencia que se cree que ya observó y vivió lo suficiente como para poder opinar, no emite palabra. De un lado, los malos recuerdos y del otro la ilusión. Pasado y futuro pelean para mejorar el presente. Mientras tantos nosotros, no encontramos respuestas.

A esta altura de la noche, cansados y con los ojos más achinados que nunca no queda otra que consultarlo con la almohada.

2 comentarios:

  1. Sí que me ha pasado eso! y más de una vez... la almohada muy pocas veces ayuda.. diría todo lo contrario!! mi calma la encuentro en otros lados!!

    abrazos


    ·SO·

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  2. Yo consulto con el sillón el dilema de "consultarlo con la almohada o no".

    Por lo general me contesta que no joda, ponga música, abra una cerveza y haga zapping... Y así sucesivamente.

    T.

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